Hace tiempo que conozco a Antonio Montoya de la red. Murciano, muy profesional, con los pies en la tierra, proactivo e innovador. Su bitácora no te deja indiferente: https://antoniomontoyavidal.com/blog/ es un blog temático sobre la gestión del talento, la empleabilidad y el futuro del trabajo, que aporta experiencia, conocimiento y valor extra en todos sus artículos.

De momento se nos resiste conocernos en persona; la pandemia no nos lo pone fácil. Pero como en otros casos, la fórmula telemática nos lo ha permitido. Me gustaría destacar su positividad, de la que siempre se aprenden cosas.

Antonio es una persona que da ejemplo en todo lo que hace, siempre dispuesto a ayudarte dentro de sus posibilidades. Es esa savia nueva que necesitan los profesionales de recursos humanos de las nuevas generaciones, que él representa. Tiene muy claro su objetivo profesional y estoy seguro que lo cumplirá. Tiene muchas ganas de hacer cosas diferentes y siempre está embarcado en nuevos proyectos. Le apasiona lo que hace y eso se percibe rápidamente.

Aquí os dejo la entrevista que le he hecho para que le conozcáis un poco más. 

¿Quién es Antonio?

Empezamos con una de las preguntas más difíciles que se le puede hacer a una persona.

Como me gustan los retos lo voy a complicar aún más y lo diré con una sola palabra. Lo que mejor me identifica es la perseverancia. ¿Todos alguna vez hemos hecho alguna dinámica de autoconocimiento, no?, bien, en este tipo de dinámicas siempre me describen con esta cualidad. Lo mejor de todo esto, no es que todas las dinámicas apunten a la misma palabra, lo mejor es que todos los que me conocen también me definen con esta palabra. Y yo conforme.

No voy a definirme con un asociacionismo y pasar a otra pregunta, quiero contaros más.

Siempre he tenido mucha claridad para dibujar los grandes objetivos que he querido conquistar y trazar los pequeños pasos hasta lograrlos. Esto, unido a una visión largoplacista, ha sido clave en mi desarrollo profesional y personal.

Para hacernos una idea del alcance y de lo que quiero trasmitiros, el camino por el que estoy pasando hoy lo dibuje, a grandes rasgos, hace unos meses.

Cuando todo ha ido bien he aprendido mucho, pero cuando no ha ido tan bien he aprendido el doble, aunque estén esos momentos difíciles en los que parece que no se puede extraer aprendizaje. No todo es un camino fácil, en ocasiones también ha tocado luchar contra las adversidades y aprender a transformar situaciones que para cualquiera pueden ser desastrosas en oportunidades. Estoy hablando concretamente de quedar en desempleo y ver en ello una oportunidad de crecimiento, que más adelante te contaré si te quedas leyendo.

Me considero un buen inversor, no de bolsa (no lo he probado) pero sí de tiempo con mis más allegados y mi red de contactos. Esto siempre ha sido básico para mí y mi desarrollo.

Por último, y no por ello menos importante, siempre me he resistido a dejarme llevar cuando las cosas no van bien, no me conformo con que “es lo que nos ha tocado”, pienso que uno tiene que tener la voluntad de persistir por lo que quiere conseguir a toda costa o ser espectador de su propia vida.

Y así, de forma muy resumida, es como me presento.

¿Cuándo surge tu vocación por el mundo de la selección y de las personas?

Todo comenzó de forma más natural y genuina que puedas imaginar, fue cursando el grado superior de animación a la actividad físico deportiva. Descubrí que trabajar con equipos de personas me encantaba, podía pasar horas y horas gestionando equipos, preparando dinámicas, talleres, y tareas para después ponerlas en marcha. Me sentía (y siento) en flow.

Todos sabemos que durante las dinámicas, en los puestos de trabajo, y en las organizaciones surgen inconvenientes. Descubrí que dar soluciones a problemas que se iban planteando me gustaba y se me da bien. Trasmitir motivación al equipo para conseguir los objetivos que buscamos es algo que también me gustado siempre.

Estos fueron los primeros pasos que me hicieron tomar un camino centrado a trabajar con y para personas.

A pesar de ello, me seguía faltando una segunda parte ¿Dónde aplicar estas competencias? Esa respuesta la encontré cursando el Grado de Psicología en una asignatura relacionada con las organizaciones y gestión de equipos.

Más tarde, todo esto lo apliqué en las formaciones que impartía, lo fui puliendo con el tiempo en los equipos de trabajo que he coordinado, hasta el día de hoy (que por supuesto sigo trabajando).

¿Qué hizo que tuvieses inquietud por escribir un blog?

Me gusta mucho comunicar y dar a conocer qué hago en mi trabajo o con mis hobbies. En mis inicios profesionales aposté por comunicar a través de Linkedin todo mi contenido, pero llegó el momento en que necesitaba más de lo que esta herramienta me permitía. Echaba en falta un lugar donde compartir más tipos de contenidos, con el formato que yo quería y al que tuviese acceso más público. También quería un lugar hecho a mi gusto y distribuir la información como a mí me gusta.

En paralelo, me gustaba (y me gusta) leer blogs de recursos humanos y empleabilidad para aprender y saber cómo abordar algunas cuestiones de nuestro trabajo. Recuerdo que leí a profesionales que no conocía, ni tenía en redes sociales, pero a día de hoy son compañeros, hablo de: Victor Candel, Grace Salazar, y el presente de Juan Martínez de Salinas.

La idea de crear mi blog estuvo latente mucho tiempo en mi cabeza, pero, por motivos de tiempo, no la materialicé. Recuerdo que en mi google keep (mi segundo cerebro en muchas ocasiones) tenía un listado denominado “Quehaceres página web” donde anotaba ideas que me surgían, apuntaba curiosidades y funcionalidades de blogs que me gustaban, pero seguía sin ponerle fecha y llenando la lista.

Hasta que un día, en una conversación con Grace Salazar, se me encendió la bombilla y le puse fecha de inicio a este proyecto. Me transmitió tanta ilusión y compromiso por su blog que me fui a mi casa a mirar hostings, dominios y plantillas de WordPress. Aunque, bueno, quienes conocemos a Grace Salazar sabemos que ella es pasión por su trabajo.

¿Qué te hizo crear tu propio blog?

Como comentaba anteriormente, uno de los motivos fue tener mi propio espacio virtual donde compartir mis experiencias y aventuras, pero este no era el fin de lanzarme a crear mi blog.

El blog en sí mismo no es (y nunca fue) una finalidad, es solo una herramienta para mejorar mi empleabilidad desde muchas vertientes.

Desde la visibilidad, busco dar a conocer mis servicios tanto por cuenta propia (captar clientes) como por cuenta ajena para que las organizaciones visibilicen mi perfil en un espacio único que les trasmita más información que mi cv.

El networking trae oportunidades, ¿qué hacemos cuando alguien nos propone algo que implique relacionarnos/colaborar con ese profesional? Yo por lo menos buscarlo por internet para tener información. El blog es una forma de tener presencia en un mundo cada vez más digitalizado en donde pueda darle información a cualquier contacto que busque compartir proyecto o colaboración conmigo. De esta forma puede saber mi forma de trabajar, qué medios domino, como comunico, y muchos más datos de interés. En ocasiones, hay profesionales que llegan de casualidad y me contactan.

Ayudar a mejorar a mis seguidores. Mi modo de entender el networking y cuidado de mi red es el win-win. Quiero que mi red crezca para que me ayude a crecer. Otra de la finalidad que persigue mi blog es ayudar a mejorar la empleabilidad y conseguir los objetivos profesionales de quienes me lean.

Desarrollo de marca personal. En el nuevo paradigma laboral es importante que sepan qué sabes hacer y qué problemas puedes solventar, ya no somos solo un curriculum con piernas que va de un sitio a otro, y en medida del nivel de estudios te valoran más o menos. Dar a conocerme profesionalmente es un valor diferencial, y que a Antonio Montoya Vidal lo asocien con recursos humanos y empleabilidad es una conexión profesión-profesional que da buenos resultados en cuanto a posicionamiento en el mercado laboral.

¿Qué es para ti la empleabilidad?

Lo definido como el compromiso que tiene uno mismo para no descolgarse del mercado laboral. Queda muy bien esta definición, lo sé, pero no hay que quedarse aquí.

Si quieres un ejemplo te diré como afronta la empleabilidad una persona que cumple con esta definición.

  • Cuando alguien se responsabiliza de su empleabilidad trabaja una visión estratégica: qué puede ofrecer y qué áreas tiene que reforzar en su perfil profesional.
  • Apuesta por su formación de forma activa, no espera a que le ofrezca la empresa un curso.
  • No espera a la situación idónea para cambiar algo, la crea.
  • Estar trabajando no es motivo de desaparecer, sigue manteniendo relación con profesionales del sector. Vía presencial o virtual.
  • Aprovecha el desempleo como una oportunidad de crecimiento profesional para fortalecer las áreas de mejora y qué reclama el mercado laboral.

El profesional de hoy en día tiene que adoptar una actitud activa de su empleabilidad, adelantarse a los nuevos acontecimientos del mercado laboral. Muchos perfiles se van a ver afectados por la digitalización y la baja cualificación. No es momento para esperar.

Quien no entienda las normas del juego será eliminado.

¿Qué te aporta tener blog?

Mi blog es un espacio donde escribo libremente dando solución a muchos de los problemas que me consultan o trabajo con mis clientes. Es un lugar donde vuelco mi experiencia, formación y conocimientos.

Tiene un efecto terapéutico profesional. Escribir y pensar en el contenido que quiero compartir me ayuda a organizar en mi cabeza muchas de las ideas que tengo sueltas. Me ayuda a replantearme algunos enfoques y crear metodología para agilizar procesos. Y, por supuesto, me doy cuenta de cuáles son mis puntos a mejorar y los más fuertes.

Evidentemente, el blog es una estrategia para la mejora de mi empleabilidad. Todo el mundo puede saber a qué me dedico y qué hago sin la necesidad de conocerme directamente o atreves de un tercero.

Sobre todo, lo que más me aporta es que todo mi entorno sepa a qué me dedico y puedan seguirme en mis aventuras.

¿Aprendizajes y decepciones de tener un blog?

La puesta en marcha el blog, lo hice de forma autónoma, lo que conllevó muchas horas de ensayo y error, leer en foros y ver videos de YouTube. Antes de iniciar no sabía ni lo que era un plugin pero, al final, de forma autodidacta creé lo que veis hoy en el blog.

No lo hice todo yo solo. No me voy a poner la medalla.

Le di un gran adelanto comprando hosting, dominio, plantilla de WordPress y posteriormente fui añadiendo contenido y dejándolo todo “bonito”. Algunos retoques me iban a llevar tanto tiempo aprender y realizarlos yo mismo que decidí contratar a un profesional para que lo pusiese en marcha. De este modo me aseguré de tener un blog profesional.

Desde el principio aprendí mucho sobre la gestión que hay detrás de un blog. Aprendí de forma autodidacta a resolver los pequeños problemas y desajustes que van surgiendo. A día de hoy me encargo del mantenimiento sin ayuda (por el momento).

A nivel técnico he aprendido mucho, está claro, pero no es el único aprendizaje de meterte en estos follones.

El auténtico aprendizaje que enriquece es el contenido que hay en el blog. Las horas dedicadas a cada entrada. No solo es sentarse y escribir, es tener la idea clara, desarrollarla, que llegue al público, incluir infografía, gifs, videos. Muchas horas dedicadas que rara vez la gente es consciente de ello y aquí quiero dar a conocer.

He tenido la gran fortuna de tener muy buenos colaboradores en el blog, que han aportado sus conocimientos y talento. Estoy muy agradecido a todos ellos:

  • Juan Gadeo aprendí cómo puede ayudar con su metodología Lego Serious Play en mi trayectoria profesional.
  • Paula Perez, nos hizo reflexionar sobre la influencia que puede tener en nuestras decisiones en el momento de pedir recomendaciones de los candidatos.
  • Yolanda Muñoz, con su dilatada experiencia, comparte cómo se debe de cuidar de los candidatos durante un proceso de selección.
  • Marcos Nathan-Gerges cuenta con todo detalle en qué consiste la metodología Ágil
  • Alberte Cea, en una conversación, comparte su amplia experiencia en el área de la orientación profesional, cómo influye la digitalización en sus sesiones de orientación.
  • Grace Salazar, hace mención en lo que tenemos que tener en cuenta a la hora de seleccionar al profesional que nos guie en la consecución de nuestros objetivos profesionales 
  • Eva Espinosa aporta, desde la experiencia, qué debemos hacer para que gracias a nuestra gestión podamos sacar el máximo rendimiento por nuestro equipo.

A estas colaboraciones se suman los contactos que surgen al visualizar mi blog. Hay profesionales que me contactan para hacer networking, otros están interesados por cómo crear un blog y saber de mi experiencia, hay quien me contacta para plantearme cuestiones relacionadas con nuestro trabajo, y profesionales que quieren compartir anécdotas o reflexiones del contenido del blog.

La palabra decepción no sería la que me identifica, pero sí la que más se aproxima. Destaco una situación que me incomoda en situaciones muy concretas. Anteriormente, he comentado que el blog es un medio para alcanzar propósitos, uno de ellos mejorar la empleabilidad. Mi decepción viene cuando he participado en procesos de selección, en la parte de entrevista, los entrevistadores no han mirado el blog o no tienen conocimiento de su existencia. Aclaro, en mi cv señalo mi blog y facilito código qr para poder acceder.
 

¿Qué competencias debe tener una persona que se dedique a los RRHH y la orientación?

RRHH y orientación para mí tienen mucho en común. Ambas disciplinas trabajan con personas en el contexto laboral, y forman parte del ciclo vital del trabajador. Las dos partes quizá más difíciles de gestionar: afrontar el desempleo y la etapa de candidato.

Me resultan muy interesantes los perfiles que han pasado por ambas disciplinas porque ayuda a entender el mercado laboral de forma conjunta y no como un puzle. Tener esta perspectiva es un punto a favor del profesional tanto de RRHH como OL.

Entender a la persona que hay detrás de cada candidatura o búsqueda de empleo es necesario para saber trabajar con él, para esto es sumamente importante la empatía.

Como he citado, ambas disciplinas trabajan con personas, hay que tener una alta capacidad de comunicación. Por comunicación, no solo me refiero saber transmitir correctamente el mensaje, hago referencia a saber cómo trasmitir. A todo el mundo no puedes hablarle en el mismo tono, con la misma vivacidad o tema, en ocasiones hay que adaptar el mensaje para que ese input lo codifique la persona y lo acepte, de lo contrario lo rechazará y no valdrá de nada lo bien que se haya comunicado.

Ambas disciplinas tienen que buscar y rastrear hasta donde no hay por encontrar personas. En RRHH, sabemos que en el área de selección busca al candidato que mejor se adapta a su posición, pero lo que poca gente sabe es que en orientación laboral es igual. En orientación, para que los proyectos se pongan en marcha es necesario contar con un número mínimo de participantes y cumplir objetivos relacionados con la asistencia (entre otros muchos). Es necesario tener muy buena red de contactos para llegar hasta la persona que necesitas incorporar a tu empresa o proyecto. Ardua tarea en ambas disciplinas.

La formación en psicología o relacionada es un valor añadido del profesional que trabaja en RRHH (parte de selección, formación y desarrollo) y en orientación laboral. Hay que entender que la empleabilidad está muy relacionada con nuestra situación personal. Muchas personas llevan una mochila o situación de casa difícil de gestionar y les interfiere con su avance profesional. Hay que ser capaces de desmenuzar esa situación y trabajar refuerzos positivos en corto plazo para avanzar.