Hace un tiempo leí un interesante artículo publicado en el diario Expansión titulado “Una buena marca personal, ¿garantiza un contrato?” y cuya lectura recomiendo y podáis sacar vuestras propias conclusiones. Este es un tema que ya he abordado en otras ocasiones, sin embargo, hoy lo quiero enfocar desde otra perspectiva.

Partamos de la base de que hacerse una buena marca personal en cualquier sector, área o materia no consiste en estar diciendo cualquier cosa de ese tema en redes sociales a todas las horas. Eso puede daros ruido, relevancia y visibilidad, pero no olvidéis que puede ser positivo o contraproducente. Ser más visible te hace más atractivo para tu sector y clientes pero siendo tan visible puede hacer que tus comentarios sean malinterpretados y ese beneficio que se pensaba que nos podría dar estar en las redes se vuelve en nuestra contra.

Actualmente, cualquiera lee cuatro cosas sobre un tema y ya se pone a dictar cátedra sobre esa materia. Seamos claros… eso no te convierte en experto, sino que eres uno más de los que tiene inquietud por esa cuestión. El saber sobre un tema requiere leer mucho, reflexionar sobre ello, crear tu propio contenido o material, trabajar en esa materia, practicar y practicar a la mínima oportunidad que tengas para consolidar esos conocimientos.

¿Estás dispuesto a hacer todo eso? Si acudimos a los cuentos con moraleja tradicionales, me gustaría que eligierais si quieres ser una hormiga 2.0 o una cigarra 0,1 con tatuaje 2.0. Si eres una hormiga eres una persona que lleva mucho tiempo trabajando, que tu actividad está ahí, te ha costado mucho llegar a tener tus conocimientos y eres reconocido en esa materia en la red y fuera de ella. Tienes claro que las redes ayudan a dar más difusión a tu actividad sin garantizar ningún resultado inmediato a pesar de tu calidad. Esto da opción de que tus contenidos lleguen a más sitios y personas. Aunque asumes que los primeros que contactarán contigo en más de una ocasión son las personas tipo cigarra que intentaran aprovecharse de tu periplo profesional. En la red, para recibir una petición interesante, recibes 50 peticiones spam que no valoran vuestro trabajo y que piensan que estáis ahí para ellos.

Si eres una cigarra 0,1 intentas la ley del mínimo esfuerzo y pretendes encumbrarte en lo alto de un sector sin estar dispuesto a invertir tiempo, practicar, trabajar, crear tu propio contenido, etc. La red es un gran escaparate donde muchos miran, comentan y pasan el tiempo, sin embargo, ¿cuántos te comprarán solamente por lo que ven ahí? Para invertir en ti, contrastarán, buscarán información, se asegurarán de que lo que aparentas en la red es la realidad fuera de ella. Si eres experto en algo tienes que tener recorrido sólido (desgraciadamente para ti no consiste en llevar diciendo cosas sobre un tema en twitter un año) y debe existir diversidad de contenido en todas las herramientas y materias posibles.

El problema no es ser cigarra 0,1 sino darse cuenta de que ese no es el camino que te ayudará. La red a veces deslumbra a muchas personas y se piensan que la clave es estar ahí todo el día. Si quieres sobresalir en una materia debes de buscar tu sitio y esto, a veces, es cuestión de creártelo. Debes experimentar, crear contenido propio, asumir riesgos, hacer cosas diferentes, seguir caminando a pesar de las adversidades. Puedes ser bueno en un área y eso, por sí solo, no te garantiza que te lluevan los contratos. Aunque tienes más opciones y puertas a las que llamar. La clave es que seas perseverante, sigas insistiendo, no hagas caso a los aduladores, creas en ti y sigas practicando a pesar de las dificultades. Una buena marca personal lleva tiempo hacerla y debes asumir que la vida no es justa. Esto significa que a veces te costará sobresalir más de lo que esperabas, sin embargo, tu constancia al final tendrá recompensa.

Es fundamental que tengas identificado cuál es tu público objetivo, cómo puedes rentabilizar tu conocimiento sobre una materia, dónde es mejor que estés para que te puedan encontrar las personas influyentes para tu materia o sector y centrarte en aportar algo diferente. A veces es cuestión de hacer algo que otros todavía no hayan hecho aun en ese formato. Por probar no pierdes nada y debes afrontar riesgos asumibles para ti. Tienes que ser valiente y creer en ti mismo. Porque a veces, lo más fácil cuando presentas algo diferente es que las personas de tu entorno lo critiquen; algunas de esas críticas no son del todo objetivas y encierran en ella envidias maliciosas. No olvidéis que forjarte una buena marca personal supone que algunas veces os equivocaréis, pero recordad que el que no lo intenta no consigue nada. La vida es actividad y debes arrepentirte de lo que intentas aunque no salga como esperas. Tu marca personal se forja por seguir ahí sin tirar la toalla a pesar de las dificultades que te surgirán. Ante todo, deberás seguir caminando en la dirección que hayas elegido para obtener éxito o un trabajo, haciendo algún desvío o apartándote alguna vez de ella, para volver. Es como todo en la vida. Difícil pero no imposible.

* Fuente imágenes utilizadas https://unsplash.com