Foto propiedad Juan Martínez de Salinas MurilloMuchas personas que están en búsqueda activa de empleo aun se piensan que el área de selección de las empresas se lee su perfil de forma completa y dedicando el tiempo adecuado. Pues ya podéis despertar porque las personas que trabajan en selección suelen dedicar entre 1 y 5 minutos a cada perfil o lo que es lo mismo, le “echan un vistazo”. Lo escanean “en vertical” buscando la información relevante que se precisa como imprescindible para cada perfil. En caso de que se localice esa información ese perfil pasará a las siguientes cribas y tendrá un análisis más en detalle.

Por lo tanto, es vital que vuestro perfil profesional esté ordenado, con la información clara, resaltando aquello imprescindible y que, sobretodo, se precise para esa posición en concreto; también es importante que sea información breve y relevante, haciendo hincapié en competencias y funciones principales.

En más de una ocasión, personas con talento han quedado fuera de proceso de selección a la primera de cambio por mandar un perfil demasiado extenso, con información no relevante, totalmente desordenado, sin conectar unas cosas con otras… Esto hace que el reclutador se despiste y pueda pasar por alto la información importante que teníais porque no se localiza fácilmente. No podéis pensar que vuestro perfil llegará al final, simplemente por como mostréis la información. Debéis facilitar la labor al seleccionador. No es cuestión de poner todo sino lanzar la información necesaria para llamar la atención que lleve a que os quieran conocer. Tenéis que saber mostrar lo que os hace diferentes y reflejar los pequeños detalles profesionales que os hacen interesantes.

Está claro que el trabajo de un seleccionador es analizar cada perfil y no dejar escapar el talento bruto o neto de los candidatos que pasen por sus manos. Sin embargo, no podemos negar que los reclutadores son personas con sus virtudes y defectos. La selección no es una ciencia exacta y la forma en la que mostréis vuestra información profesional marcará una diferencia. Vuestro perfil profesional debe entrar por los ojos, es decir, ser visual, fácil de leer, con un orden cronológico y por bloques que sea coherente. No es cuestión de cantidad sino de calidad. Un perfil de 3 hojas puede ser relevante pero farragoso por el volumen e información debido a que no deja respirar la información al estar muy compacta. Por otro lado, un perfil profesional de una hoja y media tiene menos información pero más relevante, dando pistas claras del potencial y el resto de contenido se deja para la entrevista en persona.

Ni mucho menos estoy defendiendo a los reclutadores, sin embargo, nos encontraremos con buenos profesionales y no tan buenos desempeñando este tipo de labores. Lo malo es que no podemos elegir qué tipo de profesionales os atienden o evalúan. Esa decir, os toca amoldaros a los que os toca en cada momento.

Pienso que los perfiles profesionales del futuro deben ir encaminados a convertirse en resúmenes profesionales y competenciales, haciendo hincapié en funciones, competencias académicas, profesionales, técnicas e idiomáticas con enlaces a sitios web que demuestren estas breves pinceladas en mayor  extensión y puedan reafirmar o no aquello que se ha dicho.

El CV es una herramienta muy extensa, estática y cada vez de menos utilidad. Es una herramienta que dice los que has hecho, estudiado y conseguido. Sin embargo, no demuestra nada. La clave no consiste en decirlo sino en demostrarlo. Siempre he comentado que el papel todo lo aguanta. Las palabras se pueden poner de muchas formas que nos favorezcan o no. Esto quedará ratificado o no cuando se explique contado con vuestras propias palabras con ejemplos concreto.

Las empresas dedican cada vez más tiempo a contrastar los perfiles de los candidatos. Es importante tomarse el tiempo preciso para averiguar la información de cada aspirante. Un candidato presenta determinadas cosas sobre él mismo y después el reclutador busca información en la red sobre esa persona para hacerse su composición de lugar. No olvidéis que si algo de vosotros está en la red puede ser encontrado. Así que no hacéis nada con negar determinados aspectos de vuestro perfil profesional de los que estéis menos orgullosos. Todos nosotros tenemos puntos positivos y otros a mejorar, es cuestión de tenerlos detectados y saber dar una explicación coherente y razonable.