A lo largo de nuestra vida Foto verano 2013 Juan profesional, vamos a coincidir con muchas personas de diverso tipo y condición. Debemos tener claro que caerle bien a todo el mundo es imposible y lógico al mismo tiempo.

Uno debe asumir que la perfección no existe y que todos tenemos puntos débiles, cosas a mejorar y carencias profesionales. Normalmente las personas que se consideran perfectas son las más imperfectas y se dedican a criticar al resto como mecanismo de defensa.

Por lo tanto, os recomienzo que dediquéis tiempo a conoceros y detectar aquellos aspectos en los que debéis mejorar en vuestra faceta profesional. No siempre os vais a encontrar personas amables y que os aprecien para haceros ver vuestros puntos a mejorar para ayudaros. Siempre existe gente que usa la crítica destructiva como arma para sobresalir y conseguir hacer daño a las personas a las que considera competencia por envidia, ineficiencia o falta de valía.

Normalmente, cuando uno recibe críticas de los mismos, curiosamente, es significativo de que se va por buen camino. En más de una ocasión, cuando uno consigue un éxito profesional de diversa índole, como por ejemplo, un premio, un ascenso, un nuevo proyecto profesional, una publicación en una revista especializada, etc.; siempre lo más fácil es pensar mal, dando por hecho que se lo han regalado, que ha sido por suerte, por enchufe o sin esfuerzo. Cuando la realidad suele ser muy distinta; normalmente detrás existe un gran trabajo y un recorrido profesional que no sabemos valorar. Lo fácil es recurrir a la crítica fácil, dañina y gratuita. Este tipo de personas destructivas pagan sus insatisfacciones e inseguridades con el resto. Siempre he dicho que a este tipo de personas hay que hacerles frente con la mejor arma: la ignorancia e indiferencia.

Hay quienes ven en esta actitud una carencia de capacidad de defensa, pero es todo lo contrario. EL bajar al mismo nivel que aquellos que ya han perdido el respeto no te hace mejor que ellos. Hay que saber actuar con madurez y seguir adelante con la trayectoria propia, sin que la crítica destructiva nos lleve a su mismo nivel.

Las personas que hacen crítica destructiva nunca ven valor a lo que hacen otras personas, solo es bueno lo que hacen ellas. La crítica destructiva va a ser siempre lo más fácil. Quizás estas personas deban aprender a realizar una crítica constructiva donde vean lo bueno y lo mejorable aportando para esto último sus ideas o soluciones de mejora. Siempre consideran que lo que hacen los demás no supone trabajo ni esfuerzo. Se suele decir que los toros, desde la barrera, se ven muy bien y para saber lo que cuesta o no algo debemos hacerlo nosotros mismos y comprobarlo. Todo es muy fácil de palabra y difícil desde la acción.

Me hace gracia esa gente destructiva que no para de decir no me gusta lo que cuentas, escribes o comentas en tu bitácora o en tu perfil profesional de alguna red social, sin embargo, están al tanto de todo lo que haces o dices. A mí, si algo no me interesa o gusta, dejo de leerlo y de seguirlo para dedicar mi tiempo a otras cosas más útiles. Haciendo lo contrario, uno se contradice y detrás de esas críticas subyacen otros motivos egoístas provocados por envidia, inseguridad u otras razones que denotan poca o nula profesionalidad.

Hace poco me comentaba una amiga que se había enterado que sufría en su empresa críticas hacia su trabajo de personas qué no la conocían, qué no habían trabajado con ella y que no tenían un fundamento objetivo. Detrás de esto se esconden motivos de mediocridad y de insatisfacción profesional o personal de esos compañeros. ¿Qué ganan despreciando a otra persona o lo que hace?

Cuando recibáis críticas destructivas de otras personas debéis omitirlas, ponerlas en cuarentena, buscar las verdaderas razones y detectar que se intenta conseguir con eso. A veces, se pretende minar a esa persona para que deje de llevar a cabo lo que hace y tenga menor visibilidad profesional.

Lo que también está comprobado es que cuando uno va teniendo mayor repercusión o peso en su área profesional, más críticas destructivas obtendrá porque es la única forma que tienen algunos de competir con las personas profesionales. Lo realmente importante es que creáis en vosotros mismos, que os dejéis guiar por vuestra intuición para detectar a este tipo de gente y que deis confianza de forma progresiva para evitaros males innecesarios y evitables.

No podemos olvidar que muchas personas se mueven por intereses y estos últimos pueden ser racionales o irracionales y estos últimos son muy peligrosos.

Un familiar mío siempre dice que los buenos amigos o compañeros se descubren en los momentos duros, de carestía, penurias o necesidades. La gente que os aprecia estará ahí para lo bueno y para lo malo de forma incondicional.

Cuesta menos hacer una crítica constructiva con la que se pretende ayudar al prójimo. Ayudar a mejorar a una persona a nivel profesional supone ayudar a la organización para alcanzar mayor rendimiento, productividad o beneficios. Todos necesitamos ayuda en algún momento. Si nos reímos o burlamos de las carencias de los demás, esto se volverá tarde o temprano contra nosotros porque hacer esto es lo fácil. A veces, el que muchos se comporten así, no quiere decir que hagan lo correcto. Cada uno tenéis libertad para decidir qué hacer, marcar vuestra trayectoria y dejar rastro del tipo de profesionales y personas que sois.

Si vosotros en alguna ocasión habéis realizado crítica destructiva de los demás nunca es tarde para cambiar. Se debe comenzar por asumir nuestros errores y después comenzar a ponernos más en el lugar del prójimo. Cuesta menos pensar bien que mal de los demás. Cuando una persona siempre desconfía de todos y de todo, el primero que no suele ser de fiar es él mismo.

¿Qué opinas de las críticas destructivas?