Como ya he comentado en otras ocasiones en mi blog, estamos en la época de “Potenciación de la titulitis por encima de todo” y no debemos olvidar que un titulo no sirve de nada si no tenemos los conocimientos necesarios para defendernos en esa área o para saber desempeñar las funciones de ese puesto en la práctica de la empresa.
Ahora se está apostando por la cultura de “Títulos para todos” con independencia del nivel de conocimientos que tenga cada persona. Un título puede acreditar muchas cosas y ninguna a la vez.
Un título no deja de ser un trozo de papel oficial que acredita o certifica que determinada persona tiene unos conocimientos sobre un área o mejor dicho que en cierto momento se supone que los tuvo. Voy a poner un ejemplo: una persona, en un momento dado, ha podido realizar un curso de 400 horas sobre Excel y acabar el curso con unos conocimientos elevados de la aplicación, sin embargo, si van pasando meses y años y no pone en práctica lo aprendido ni en su vida personal o profesional, los irá olvidando y se puede afirmar que tras una largo período sin practicar, esa persona no tiene ni idea de Excel. Por supuesto, podrá incluir en su currículum que tiene conocimientos elevados de Excel porque un título así lo acredita, sin embargo, eso luego debe demostrarse de forma real y eso ya no es cuestión de tener títulos o no, sino de saber defenderse o no en esa materia concreta.
En la formación se está potenciando cada vez más que las personas adquieran el certificado y lo que debe primar es que la persona aprenda y alcance de forma optima los objetivos del curso y aquellos que no lo demuestren de una forma objetiva no se les debe dar el “papel” y se les deberán plantear formulas para que más adelante puedan hacerlo. Hacer lo contrario va en detrimento de la calidad de la formación y de los alumnos que no han alcanzado el nivel esperado. ¿De qué sirve que esos alumnos tengan un título que especifique que se ha realizado un curso de X horas sobre unas materias concretas si luego esta persona no sabe defenderse en dicha área?
El adquirir y consolidar conocimientos requiere un esfuerzo que se debe acreditar y demostrar a corto, medio y largo plazo para conseguir arraigar esos conocimientos, es decir, una vez adquiridos, se debe practicar, mejorar, refrescar y actualizar, teniendo en cuenta las necesidades de cada momento.
Los conocimientos sin práctica se olvidan. Nuestro sistema educativo se basa demasiado en memorizar cosas y se olvida en hacer más hincapié en la puesta en práctica de los mismos y la experimentación para llegar a conclusiones de una forma más didáctica. El memorizar sin entender y asimilar no sirve más que para pasar unos exámenes que nos permitan acceder al título pero no consiguen la finalidad global de afianzar conocimientos e ideas de una área profesional.
Por supuesto, muchas personas pueden estar en contra de estas ideas que he estoy intentando plasmar en este artículo. Me gustaría plantearos unas cuantas preguntas: ¿Cuántos conocimientos del último curso recibido habéis consolidado e implementado en vuestros hábitos laborales? Independientemente de la respuesta de la pregunta anterior ¿Conseguisteis el título de ese curso? ¿Qué creéis que falla del actual sistema formativo español?
Estoy de acuerdo en que se debe acreditar que se tienen unos conocimientos básicos de cada materia para pasar de nivel, sin embargo, no podemos basar todo en esto y se debe reforzar con la práctica y la experimentación. No se debe dar tanta importancia al aprobado o al suspenso y debemos prestar mayor atención al proceso de aprendizaje y de adquisición de conocimientos de formas adecuada para poder aplicarlos una vez finalizado el proceso de aprendizaje.
¿O acaso me podéis asegurar que tenéis las ideas claras y conocimientos necesarios de todas las materias que usáis en vuestro día a día en el ámbito laboral?
Los títulos son un medio que nos puede acercar o alejar del fin que es la adquisición y consolidación de conocimientos que dependerá del proceso previo y posterior previsto para cada materia.
¿Qué valor dais a los títulos académicos?
Hola Juan,
como siempre, reflejas muy directamente la realidad de la situación. Y es de agradecer, porque es la mejor manera de poner medios en el asunto.
Está claro que en nuestro país hay una gran distancia entre formación y la realidad del mercado laboral.
Hace tiempo ley un artículo en la contra de ‘La Vanguardia’ de un ingeniero alemán que lleva muchos años trabajando en España y que hablaba del sistema educativo en su país de origen. El modelo sigue basándose en el sistema gremial (aquí desapareció en los 80 el puesto de «Aprendiz») en el que mientras estudias, aplicas los conocimientos en las empresas donde realizas las prácticas (ya desde el primer año). Por lo que se, mientras realizas los estudios obtienes 2 ó 3 títulos intermedios que van asociados a un salario mínimo hasta conseguir el grado superior. Por lo que se ve, las empresas tienen confianza ciega en los candidatos que disponen estos títulos.
Un saludo,
Xavi
Hola Xavi,
Gracias por participar.
La diferencia en España entre formación y necesidad del mercado laboral es abismal. Debe potenciarse mucho más el aprendizaje y la experimentación porque sin esto los títulos están carentes de realidad.
Esa fórmula de Alemania es una opción a contemplar y buscar la que mejor se adapte a nuestro sistema, sin embargo, esto requiere un giro de 180 gados en nuestro sistema.
Saludos,
Juan
Hola Juan
Todo el mal que describes del sistema formativo español viene, a mi juicio, de confundir, desde siempre, el concepto de cualificación con el de competencia.
De siempre en este país se ha asociado el concepto de cualificación al nivel académico reconocido oficialmente, basado en una simple adquisición de conocimento, sin llegar a la aplicación de ese conocimiento a las situaciones reales de trabajo, la verdadera competencia.
Por eso se puede estar cualificado en algo y no ser competente en ello, así como se puede ser competente y no estar cualificado, que te lo reconozcan oficialmente.
Todo esto está cambiando algo, afortunadamente desde 2002 con la Ley de las Cualificaciones y de la FP. Sobre todo desde que se han puesto en marcha procesos de reconocimiento de competencia mediante el RD 1224/2009. Dicha Ley y dicho RD deja bien claro que la competencia no sólo se consigue por vía formativa formal sino que también se adquiere por la vía de la experiencia y de formación no formal.
Lo que hace falta es que se reconozca esa competencia a quien la tiene para que con la titulitis de este país se le considere cualificado.
Hola Juan,
Precisamente lo que más eché de menos de mi época universitaria fue esa falta de experimentación que señalas, el poder poner en práctica todos los conocimientos adquiridos. Así lo que pasa es que cuando uno sale de la carrera no tiene claro en qué área quiere trabajar porque no se le ha dado la oportunidad de ponerlo en práctica…
Un saludo.
Hola Luis,
Gracias por pasarte y participar en mi blog.
Efectivamente, con la Ley de las Cualificaciones un poco se ha clarificado el tema, sin embargo, se ha comenzado la casa por el tejado. Una persona debe estar cualificada y ser competente a la vez para que el sistema funcione de forma real y practica.
Saludos,
Juan
Hola Carol,
Gracias por participar.
A mí me pasa como a ti que cuando acabe la carrera me faltaba la experimentación necesaria para poner en práctica los conocimientos adquiridos y así asimilarlos. De esta forma, uno puede tener más claro si unas materias le gustan o no conociéndolas desde todas las perspectivas posibles.
Me consta que ha ido mejorando levemente, aunque aún dista mucho de los niveles de interactuación necesarios.
Saludos,
Juan
Hola Juan.
Según publicaba un periódico de tirada nacional el 75% de fraude fiscal corresponde a los empresarios. El 70% de los trabajadores reconoce trabajar más horas de las que les corresponde y el 30% de los titulados realiza tareas que están por debajo de su preparación. El problama no es la «titulitis» sino los sectores productivos en los que nos movemos. ¿Reforma laboral?
Hola Jesús,
Gracias por participar.
Por supuesto, el problema que indicas tú también existe aunque es diferente al que tratamos en este artículo.
El fraude fiscal que realizan las empresas y algunas personas se debe cortar de raíz porque eso nos hace daño a todos.
Saludos,
Juan
Lo interesante es formarse siempre en mateias que puedas practicar en tu profesión, que te sean útiles para progresar laboralmente. Yo creoq ue la forma de mejorar ese aspecto del mercado sería que empresas y empleados diseñaran juntos un plan de formación personalizado que fuera útil para ambos. Yo trabajo en una multinacional, y eso se hace con buenos resultados.
Hola Marta,
Gracias por pasarte y participar en mi blog.
Coincido contigo en que los planes de formación en las organizaciones deben estar diseñados por todos los componentes de la organización para ajustarse a las necesidades reales.
Saludos,
Juan
Me permito añadir que incluso la titulitis actúa como freno de los verdaderos talentos de la persona. Nos centramos en valorar los títulos cuando lo verdaderamente importante es el talento. Cuantas personas me he encontrado con un expediente académico brillante pero sin talento para el desarrollo de su profesión
Hola Sonia,
Gracias por pasarte y participar en mi blog.
Los títulos deben ser un medio para desarrollar aun más nuestras competencias y el talento que todos tenemos. Sin embargo, el tener títulos se ha convertido en un fin sin mayor recorrido y ahí está el error fundamental. Los títulos por si solos sin acciones posteriores y anteriores no ayudan a desarrollarnos.
Saludos,
Juan
Hola Juan,
Enhorabuena por el blog y por el post.
Personalmente creo que aunque llevas mucha razón en lo que escribes, es importante que los profesionales acrediten con títulos y certificaciones diferentes estados de formación que han superado. No conozco otra forma mejor de acreditarlo.
Si yo contrato un proyecto de creación de una base de datos a un señor que no he visto nunca, necesito que me acredite que al menos está titulado en aquello por lo que le estoy pagando. El talento del señor lo veré a lo largo del proyecto, pero a priori ¿cómo seleccionar? Esto mismo es fundamental cuando se trabaja con la administración pública.
En el mundo en el que yo trabajo (la seguridad informártica) el negocio de las certificaciones está muy extendido, y «es bueno» que seas CISSP, CISA, CISM, etc. Son certificaciones internacionales emitidas por organismos independientes que sin duda alguna generan un gran negocio a su alrededor, pero que también verifican una serie de conocimientos en un momento (en el examen) y que después te obligan a mantener unos créditos de formación periódicamente para comprobar que sigues actualizándote en esas materias.
Insisto en que aunque estoy de acuerdo con parte de lo que comentas, no encuentro una manera mejor de demostrar de manera independiente que un profesional ha llegado a adquirir unos conocimientos mínimos en algún momento.
Saludos,
http://www.buengestor.es
Hola Alberto,
Gracias por pasarte y participar en mi blog.
Lógicamente las titulaciones son necesarias, sin embargo, para conseguir estar titulado los exámenes deben ser más prácticos y deben existir pruebas de actualización y reciclado para estar al día.
La selección debe basarse más en demostrar que sabes hacer de forma práctica a pesar de que acredites que tienes el titulo académico que presupone que lo sabes. Hacer pruebas experienciales en el puesto de trabajo donde se tenga que simular como harías el trabajo y resolverías cuestiones del día a día de ese trabajo.
En el tema de las certificaciones de seguridad informática se acredita que se tiene el conocimiento teórico y practico. Ese es el error de muchas titulaciones. Es decir, supone cambiar el sistema de forma radical y seleccionar a la gente por lo que realmente es y sabe hacer y no por lo que aparenta a priori.
Saludos,
Juan
Hola Juan veo que has borrado mi comentario, claro seguro que te ofenden porque como formas parte de los que quieren arruinar al pais y enriquecerse a su costa, entonces es normal. Muy bien, no hay más que hablar ya nos veremos, por cierto ¡ enhorabuena por tu mierda de blog !
Hola Roberto,
En primer lugar, pedirte disculpas por las molestias ocasionadas. Sin embargo, he de comentarte que durante los últimos días por problemas con el servidor donde tengo alojado el blog he estado haciendo labores de mantenimiento. Debido a esto los comentarios que habéis dejado aparecían como publicados pero realmente no me aparecían y parece que ya se ha solucionado.
Por ello, tendrás que volver a publicar los comentarios que pusiste en mi blog y encantando los leeré y contestaré.
Saludos,
Juan
Lo que acredita un titulo realmente, no son los conocimientos, que todo el mundo adquiere trabajando, es que la persona posee una determinada CAPACIDAD DE APRENDIZAJE, ya que mientras otros se han quedado en el camino en las sucesivas etapas formativas, esa persona ha tenido la capacidad y la tenacidad suficiente para pasar todas las sucesivas cribas que no son pocas en este pais.
Estoy de acuerdo contigo en que la enseñanza en este pais es poco practica, mejorable, y que a lo mejor no implica necesariamente saber mas, pero significa que el que lo consigue, no es gracias al sistema educativo, sino a pesar de, lo que en mi opinion da mas valor al titulo.
Hola Ana,
Gracias por pasarte y participar en mi blog.
Ciertamente a mayor estudios la capacidad de aprendizaje es mayor por múltiples razones aunque eso no significa que tenga mayor practica en la realización de determinadas tareas.
Aun queda mucho camino por recorrer.
Saludos,
Juan
Estoy de acuerdo contigo, Juan.
Lo que sucede es que hay tantísimos estudios y tantísimas profesiones que es normal que haya titulitis. Yo, que ahora estoy centrada en lo social veo que hay títulos, tanto universitarios como FP para: trabajador social, educador social, animador sociocultural, mediador intercultural, integrador social…..
Entonces, si te quieres dedicar a temas sociales, ¿qué haces? Estudiarte todas estas carreras y módulos para tener todas las posibilidades que hay en el mercado??
En mi experiencia, si yo soy trabajador social, y pido un puesto de animación sociocultural porque creo que valgo para ello y además lo he estudiado en la carrera, antes van a coger a alguien con el ciclo formativo de animación sociocultural.
Así que, bajo mi punto de vista, tantos estudios nuevos y nuevas profesiones, no sirve más que para restarnos posibilidades.
Además está lo que se ha comentado por ahí. Las prácticas en las carreras universitarias deberían ser obligatorias, no sólo privilegio de unos pocos. ¿Por qué los de magisterio las tienen y los demás no? Los de más tienen que buscarlas y eso ya es cuestión de suerte. Yo las solicité en su día en todos los sitios que pude, no me las concedieron y así me ha ido luego.
Hola Crisálida,
Gracias por participar y dar tu opinión.
Estamos de acuerdo que la diversidad de estudios tan similares hace que se produzca el efecto contrario, la excesiva especialización en exceso tampoco es bueno. Uno no puede tener todos los títulos afines a sus estudios principales.
Comparto contigo que en todas las carreras universitarias y grados de formación profesional las practicas deben ser obligatorias porque son un aprendizaje muy vital.
Saludos,
Juan
Hola Juan,
Felicitarte por el post ya que me parece un tema muy recurrente y del que se está escribiendo mucho en las últimas fechas.
En mi opinión y debido a la gran competitividad en la que nos movemos, la formación universitaria hace tiempo que dejó de ser garantía de empleo. En tiempos de crisis como la que atravesamos, tenemos la opción del autoempleo, la cooperación o la vía de la formación que es el caso más común.
Pero tengo que decir que en muchos casos no son las personas las que quieren coleccionar títulos, son los empleadores quienes los exigen. (Sólo hay que mirar unas cuantas web de empleo para darse cuenta). La universidad, FP..etc estudios en general, amplían los conocimientos que son tan necesarios en la profesión, pero es clave que muchas empresas apuesten por dar las primeras oportunidades a personal muy válido y con muchas ganas de trabajar, sin importar tanto el «valioso papel».
Hola Carlos,
Gracias por pasarte y participar en mi blog. Me alegro que te guste el post.
Coincido contigo en que los títulos universitarios hace tiempo que dejaron de garantizar un puesto de trabajo. Muchas veces esto es la pescadilla que se muerde la cola porque son las propias organizaciones las que exigen esa variedad de títulos inacabables para ciertas ocupaciones. Por supuesto, la preparación de las personas es necesaria pero siempre con objetividad y con un razonamiento lógico.
Saludos,
Juan