Con cierta sorpresa, leí una noticia en el diario digital equipos y talento que llevaba por título “El 53% de los trabajadores cree que si se queda en paro encontraría un empleo similar”. Personalmente, me parece una afirmación muy optimista, aunque tampoco tiene por qué ser mentira. Y sino, respondamos a la siguiente pregunta: ¿en cuánto tiempo piensan encontrar un trabajo similar? De la misma forma, debemos averiguar qué entendemos por un trabajo similar porque es algo muy subjetivo y particular.
Está claro que no se debe tener miedo a perder el trabajo de forma obsesiva porque hoy en día, con la inestabilidad laboral en la que nos encontramos, cualquiera nos podemos encontrar en esa situación de un día para otro. Por supuesto, eso no quita para que estemos preocupados por la situación de incertidumbre que vivimos en todos los sectores. Sin embargo, debemos asumir que, normalmente, el quedarnos sin trabajo no depende en estos tiempos de nosotros, salvo excepciones.
Aunque las personas que ahora tienen trabajo y dijeron esa afirmación de forma tan segura, deben asumir que desde la barrera se ven muy bien los toros, es decir, que es muy fácil hablar de algo que no sufren en primera persona. La realidad es que en España actualmente tenemos más de 4 millones de desempleados y somos el país de la Unión Europa con mayor tasa de desempleo desde hace unos cuantos meses.
La gran mayoría de los desempleados se levantan todos los días con la esperanza de conseguir colocarse o no, en algún trabajo “similar” al que realizaban antes de estar en esta situación anterior, en función de sus necesidades, circunstancias y tiempo que lleven sin trabajo.
Asumamos que muchas personas preparadas tardan entre 6 meses y un año con suerte, dedicación e inversión de tiempo en encontrar un trabajo a día de hoy. Un porcentaje minoritario de personas lo puede encontrar en un período de tiempo inferior, sin embargo, no es algo generalizado desde mi modesto punto de vista.
También tenemos que asumir que, en la actualidad, cuando uno se queda sin trabajo debe asumir que debe ser más flexible y adaptable que antes, cuando se pone a mirar un puesto nuevo. Cada trabajo es distinto y, por regla general, en la actualidad por hacer lo mismo que antes o incluso más se suele pagar menos; salvo en contadas ocasiones, es una de las consecuencias que nos ha traído la crisis. Ahora, más que nunca, uno debe demostrar su valía, independientemente de lo que haya podido demostrar en otros trabajos porque existe una competencia brutal con mucho nivel de talento que no ponen nada fácil el llevarse el gato al agua.
Con esto ni mucho menos pretendo asustar a las personas que tienen empleo, sin embargo, debido a mi puesto actual, estoy en contacto directo con el mercado laboral, lo que ofrecen las organizaciones, qué tipo de personas están sin trabajo y su nivel de preparación. Y debido a ello, aunque me cueste admitirlo, dudo mucho que lo que piensa ese gran porcentaje de personas sea la realidad.
No olvidemos así mismo que lo que abunda en mayor medida ahora es la temporalidad y lo peor de todo es que además, hay que estar contentos de conseguirlo, aunque sea de 3, 6 ó 9 meses; pasado ese tiempo, ya se verá.
Se nota como van evolucionando las personas desde que se acaban de quedar sin trabajo  y tras ver como van pasando los meses, es decir, van cambiando de forma de pensar, adaptándose a la realidad existente. Algunas personas al principio aseveran que ellos solo buscan algo estable y a mi me surge la pregunta ¿Qué entendemos por estabilidad? Tras comprobar que ese tipo de puestos no abundan y ver como están más tiempo del esperado en busca de trabajo, empiezan a matizar generando nervios.
No podemos partir de una idea preconcebida y más, en estos momentos. Uno debe ser optimista a la vez que realista siendo, antes que nada, humilde porque muchas personas validas, con potencial y preparadas se encuentran sin trabajo desde hace meses y eso no es por casualidad ni porque quieran al menos en la mayoría de los casos.
La mejor opción es comenzar lo antes posible a la acción para ver como esta el mercado en el que nos queremos mover y, en función de esto, ir tomando las decisiones que más os puedan convenir.
Si no estáis de acuerdo con lo que digo, os lanzo la pregunta de ¿a cuántas personas conocéis que hayan cambiado de trabajo en el último año? Personalmente, yo no conozco a nadie que durante este último año cambiase teniendo un trabajo a otro similar o mucho mejor, independientemente de que estuviese contento o no. Es decir, las personas en estos momentos no asumen riesgos por regla general porque prefieren la seguridad y comodidad. Esto es lo que hay, independientemente de las aspiraciones profesionales que pueda tener uno, porque ahora mismo, este tipo de decisiones deben de meditarse más, asumiendo las consecuencias que pueden conllevar. Sí que conozco varios casos de personas que se han despedido de sus trabajos sin tener otro trabajo y, en la mayoría de los casos, se han arrepentido porque no pensaban que la situación era tan complicada de cara a poder colocarse de nuevo.
Por supuesto, este es un tema peliagudo que da para muchos puntos de vista y por ello os lanzo la pregunta de ¿Creéis que os sería fácil encontrar ahora un trabajo igual al que tenéis?
Cada persona es un mundo, sin embargo, el optimismo en exceso, igual que el pesimismo, no es bueno; lo mejor y más complicado el termino medio.