Este tipo de conflictos Jefe/trabajador tiene que ver con asuntos tales como la remuneración, productividad y las condiciones generales de trabajo principalmente, sin olvidar lógicamente otros temas.
No obstante, estas discrepancias también se pueden presentar cuando los subordinados desean participar en los procesos de toma de decisiones que pueden afectarlos directa o indirectamente.
Los conflictos subordinados–Jefe afectan a los primeros cuando tienen relaciones tensas con el segundo.
En apariencia, la comunicación subordinado–jefe puede parecer fluida, pero la tensión frecuente origina pequeños conflictos, cuya repetición genera desmotivación.
«Se trata de un tipo de conflicto en el que predomina la actitud de víctima, puesto que el subordinado se siente víctima del líder».
El jefe que quiera tener el mejor sistema de reducción de conflictos ha de ser una persona siempre presente, siempre disponible, ha de saber escuchar y ha de estar dispuesto a formar (e informar) permanentemente a sus subordinados, de cara a que sea una persona cercana y razonable, ya que si los subordinados no perciben esta actitud, no van a tener confianza para poderle plantear los asuntos mas escabrosos que les puedan surgir en su relación diaria de trabajo con el.
Por otra parte, los conflictos entre los subordinados y el líder provocan tensión, pérdida de tiempo y una gran ineficiencia laboral.
El modo mas sencillo de contrarrestar este tipo de conflictos consiste principalmente en conseguir estas dos recomendaciones:
-Que los trabajadores puedan expresar abiertamente sus temores (y que lo hagan porque encuentren un ambiente propicio para ello), incomprensiones, ideales y manifestaciones de sus propias capacidades.
– Generar un ambiente tolerante al error, un ambiente confiable que evite que los trabajadores se sientan intimidados a la hora de actuar.
Lógicamente mi recomendación es que no hay una forma única de poder afrontar este tipo de conflictos de forma adecuada, eso sí, yo creo que lo fundamental no es evitar que se produzcan, ya que es habitual este tipo de situaciones con las personas que tenemos mas próximas en el ámbito laboral, lo fundamental es tener intención de querer resolverlos y poner empeño ambas partes para conseguirlo, ya que no olvidemos que ninguna de las partes tienen la razón absoluta en ninguna ocasión, y que depende del enfoque que se le quiera dar.
Hola María,
Gracias por pasarte y participar en mi blog.
Cuando uno ocupa puestos de responsabilidad a veces tiene que tomar decisiones complicadas por diversos motivos y eso no quiere decir que sea fácil. Nunca es agradable tener que despedir a personas. Las personas piensan que ser jefe es fácil, sin embargo, gestionar equipos y sus circunstancias no es nada fácil.
Puedes intentar hablar con las personas que se han quedado en el equipo para hablar con tranquilidad y limar asperezas para comenzar desde cero.
Saludos y suerte,
Juan
buenas tardes mi nombre es luciano, y soy estudiante de 1 año de la carrera de recursos humanos, me sirvio mucho que traten este tema ya que en las actividades de mi carrera trata de esta problematica, pasare seguido por su blog ya que me sirve mucho como material adicional, y espero no incomodarlos con alguna pregunta que me pueda surgir, desde ya muchas gracias.
Saludos!
Estoy leyendo tu articulo, me parece muy bueno. Como dices hay un sin fin de maneras de arreglar un conflicto laboral entre subordinados y jefes. El tiempo de solución es importante, no dejar pasar, porque se vuelve como una bola de nieve, lo que a mi particularmente me hace ruido, es como haces en caso de despido, para que la gente que se quede no se deprima, y tu diste una buena opción que es la de hablar con cada uno, aunque no se, me gustaría que mas podría hacer, he estado pensando en armar un curso de integración y otro de liderazgo para los jefes…